El caso de Britney Spears contra el conservatorio impuesto durante más de una década por su familia, ha puesto en discusión el tema de por qué a las mujeres se les invalida cuando se enfrentan a problemas con su salud mental.
Un ejemplo evidente es el tratamiento del público, los medios y las leyes a Britney cuando se le compara con Kanye West.
El rapero, diagnosticado con trastorno bipolar, no solo maneja perfectamente sus negocios y no tiene interferencia de nadie, sino que incluso fue candidato a la presidencia de Estados Unidos en 2020.
En cambio, el caso de Britney es completamente opuesto. Se le asignó un conservador, su padre, para que decidiera todo, desde sus negocios y la administración de su dinero, hasta sus métodos anticonceptivos.
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El hecho de que cualquier persona tenga semejante poder sobre la vida de alguien llamó la atención del público, que durante meses ha pedido la liberación de la artista, con el hashtag #FreeBritney.
Una vida manejada por los hombres
Durante años, el caso de Britney ha sido la historia de cómo una mujer le han impedido ser dueña de su propia narrativa. En cambio, han sido los hombres en su vida quienes han dictado cómo es percibida.
Justin Timberlake, por su éxito ‘Cry me a river’ fue acusado de posicionarla como infiel. Los medios la señalaron de “mala madre” y su padre ha mantenido la historia durante años de que ella no puede hacerse cargo de sí misma.
Ahora Britney reclama la posibilidad de que se respete el derecho a elegir sobre su propio cuerpo, decidir cuándo casarse, cuándo quedar embarazada. También quiere hacer algo por lo demás justo: controlar en qué se gasta el dinero que ella ha producido durante más de 20 años de carrera.
Como Kanye West, muchos otros hombres que han enfrentado condiciones mentales no se han encontrado con la dureza de un conservatorio como el caso de Britney Spears.
Amanda Bynes, otra antigua miembro del grupo de estrellas juveniles de Disney, fue puesta también bajo un conservatorio legal en 2014. La actriz padece desorden bipolar y ha dicho que este conservatorio le cuesta miles de dólares al mes, por lo que quiere acabarlo. ¿Podrás liberarse estas estrellas?
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