Rafael Amaya renació como el ave fénix luego de emprender una misión importante para recuperar su vida y es que el actor se dejó llevar por los excesos hasta llegar al límite
Hay un famoso dicho que dice “después de la tormenta viene la calma” y parece que este refrán popular encaja perfecto con la historia de este guapo mexicano.
El artista de 45 años está de regreso en la pantalla de Telemundo para estrenar la octava temporada de ‘El señor de los cielos’, una serie muy exitosa que protagoniza desde el año 2013.
Ver esta publicación en Instagram
Te puede interesar: Rafael Amaya más guapo que nunca tras rehabilitarse: “Gracias, Dios, por darme esta oportunidad”
El actor Rafael Amaya quiere seguir brillando
No se puede negar que este hombre es considerado uno de los galanes mexicanos más codiciados de la historia. Sin embargo, su vida no es color de rosa y aunque él mismo lo admite, también deja claro que quiere seguir triunfando en su carrera profesional.
El conocido ‘Aurelio Casillas’ conversó con Jessica Carrillo y Lourdes Stephen para el programa de Telemundo ‘Al rojo vivo’ y se sinceró sobre sus planes en la actuación. Incluso, confesó que decidió regresar por la puerta grande de la mano de ese personaje porque le ofreció mucha luz.
“El personaje me dio mucha, mucha, mucha luz, nada más que yo me desvié a la oscuridad. Me metí a ese mundo oscuro y siniestro al cual no quiero regresar. Dicen que para conocer la luz hay que conocer la oscuridad y entonces así fue”, comentó el artista.
Ver esta publicación en Instagram
Quizás no haya sido fácil para el actor Rafael Amaya salir de ese mundo en el que se metió, pero detalló que fue su voluntad por cambiar la que le dio la fuerza que necesitaba.
“Es lo principal. El querer tú mismo. Es algo que te jala en tu interior y te dice que tienes que salir adelante. Yo creo que a lo mejor mi espíritu, algo, porque si tú no quieres estar bien, ni tu familia, ni tus amigos, ni tu novia, nadie… Pero yo sí quería estar bien, sí quería estar en el lado de la luz”, enfatizó.
Ver esta publicación en Instagram
Otro punto que sacó a relucir el galán mexicano es que él no es una victima, más bien se considera un sobreviviente de sus malas decisiones de vida.
“Cuando tocas lados muy oscuros de tu vida buscas la manera de sobrevivir. Yo no soy una víctima, yo soy un sobreviviente. Yo soy una persona que tuvo la suerte de ver la luz y de buscarla. De tener el valor, la templanza y tener el guía necesario”, manifestó Amaya.