Kristina Ozturk tiene 24 años y 22 hijos. La primera es una niña de seis años de una relación anterior, y los demás son 21 bebés que ha tenido con su esposo, el millonario turco Galip Ozturk, de 57 años, a través de gestación subrogada.
De acuerdo al New York Post, la pareja ha gastado 195 mil dólares en pago por maternidad subrogada y 96 mil dólares al año en los salarios de las 16 niñeras que los cuidan.
Los 21 niños han llegado entre enero de 2020 y julio de 2021, extendiendo la familia a un frenético paso. “Estoy con los niños todo el tiempo, haciendo todas las cosas que las mamás hacen normalmente. La única diferencia es la cantidad de niños. Cada día es diferente, desde la planificación de los horarios del personal hasta las compras para mi familia”, explica Kristina Ozturk.

Al grupo se agrega un niño de nueve años de su esposo, para un total de 23 niños viviendo en la misma casa, lo que sin duda es una experiencia única en su estilo. En su cuenta de Instagram, Kristina se pregunta si llegará a tener 105 bebés, en la que parece ser su meta.
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También ha comentado sobre la posibilidad de embarazarse en el futuro y seguir ampliando su familia. Asegura que “No importa ser la familia más grande sino la familia con más amor”.
Para Kristina Ozturk los hijos son lo más importante
Ante la cantidad de niños, en las redes sociales le han preguntado si al haber tantos realmente puede pasar tiempo de calidad con cada uno y desarrollar una relación íntima de madre e hijo. A lo que ella respondió: “Tenemos un vínculo especial con cada niño. Deseo que todos los padres puedan pasar todo su tiempo con sus hijos porque esto es lo más importante en la vida”.
Pero fuera de la vida de mamá bloguera, Kristina Ozturk se ha enfrentado a las críticas. Por una parte, su esposo, Galip, fue condenado a cadena perpetua en Turquía, de donde se fue a Georgia. Allí conoció a la influenciadora rusa.

Sobre su decisión de usar gestación subrogada, asegura que fue una decisión bien pensada. “Los niños seguirían siendo genéticamente nuestros, pero podríamos tenerlos todos a la vez. No quedarme embarazada significaba estar en forma y bien para cuidar de todos ellos. Disfruté estar embarazada de Victoria, pero sé que ser madre es más que tener un bebé, así que no sentí que me estuviera perdiendo nada”, dijo en una entrevista.

Las reacciones oscilan entre la curiosidad y el asombro y la franca crítica. Los comentarios de tuiteros han sido particularmente ásperos: “Sin más filtro de idoneidad para conseguir bebés que tener mucho dinero. Gracias a la industria de la explotación reproductiva lo mismo te montas una familia numerosa, que un equipo de fútbol”, señaló un usuario.
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Consciente de estos comentarios, Kristina Ozturk ha hablado sobre el tema: “No uses la gestación subrogada si no quieres, es tu decisión. Pero esta es nuestra vida y nuestra decisión”, subrayó.
Igualmente, conversó sobre el lado no tan amable de la la gestación, que ocurrió cuando una de las mujeres no quiso entregar al bebé después de dar a luz. “Una de las madres sustitutas luchó para no entregarnos a nuestro bebé. Debe haber sido emotivo para ella, pero el niño era mío y de Galip, no de ella. Afortunadamente, ella no tenía ningún derecho legal a nuestro bebé, que está seguro en casa con nosotros”.