Una viuda dio a luz al bebé de su difunto esposo utilizando embriones congelados. El hecho ocurrió a 14 meses de haber perdido al que describió como el amor de su vida.
Sarah Shellenberger, de 40 años, trajo al mundo al pequeño Hayes, y asegura que el bebé ha sido su “medicina” contra el corazón roto. El niño ha sido un milagro reconfortante para ella, después de que perdió a su esposo Scott, de 41 años, a causa de un ataque cardíaco en febrero de 2020.
Además de Hayes, ella espera tener otro bebé de su esposo fallecido, y tiene la intención de pasar por el proceso con el segundo y último embrión viable.
Sarah, que es una maestra de Oklahoma City, Estados Unidos, dijo: “Sostener a Hayes ha sido una buena medicina para mí y me ha curado el corazón de muchas maneras”.
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Una pérdida inesperada
Sarah y Scott, quien era un profesor de ciencias, acababan de completar la fertilización de un embrión en una clínica de fertilidad de Barbados cuando Scott perdió la vida repentinamente, mientras daba una clase en la universidad.
Ella estaba convencida de que Scott habría querido que ella diera a luz al bebé y quedó embarazada de Hayes en agosto pasado, seis meses después de perder a Scott. Sarah dijo: “A nuestros ojos, tenemos estos dos embriones que ya están creados y son nuestros hijos. Sentí que tenía que tratar de quedar embarazada y traer a nuestros hijos a este mundo”.
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La historia de Sarah ha inspirado a muchas personas que han experimentado la pérdida de sus parejas y ven en sus hijos una esperanza, una razón para intentar ser felices y levantarse todas las mañanas.
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