El champú seco es un producto de belleza que resulta bastante útil en momentos de apuros. Y es que no solo ayuda a disimular el exceso de grasa en el cabello sino que también funciona como fijador y aporta volumen.
Conseguir uno no es algo del otro mundo pero claro que hay opciones caseras y libres de químicos que sirven de igual manera. ¡Aprende a hacer uno!
Como nos encanta ser cómplices de tu rutina de belleza, vamos a darte varias recetas para que elabores el champú seco que mejor se adapte a tus necesidades.
Aprende a preparar champú seco y hazlo desde la comodidad de tu casa
Es importante aclarar que el uso de este producto no debe ser frecuente pues el champú seco es para casos especiales. Además, no sustituye el lavado del pelo convencional solo brinda una ayuda que necesitas en un momento de apuro.
¿Cuándo es el momento perfecto de usarlo? Al tener un evento o reunión y no tienes tiempo de lavarte el cabello pero quieres lucir fabulosa, por ejemplo.
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¡Con talco!
Este es el truco más sencillo y popular que existe cuando se quiere conseguir el efecto del champú seco de inmediato. La mejor parte es que casi todo el mundo tiene talco en su casa y para esta preparación si el que tienes es de bebé excelente.
Lo único que tienes que hacer es agarrar una cantidad considerada de talco de bebé para luego aplicarlo en las raíces del cabello. Después de eso, masajea un poco y péinate. La idea es que el producto se difumine bien y no quede ningún rastro blanco.

Para melenas castañas
Solo necesitas tres ingredientes para que puedas hacer un champú seco ideal para las que tienen una hermosa cabellera castaña. Busca en casa: dos cucharadas de fécula de maíz, cinco gotas de aceite de lavanda y dos cucharadas de cacao en polvo.
Combina todos los ingredientes en un recipiente pequeño y ponlos sobre tu cabello para luego comenzar a masajear. Posteriormente, espera que la preparación actúe durante unos cinco minutos y retira el exceso con los dedos o usando un cepillo.
Ideal para las de cabello rubio
Si los tonos amarillos, dorados o miel son los protagonistas de tu melena, lo mejor es apostar por el champú seco más adecuado. Consigue: dos cucharadas de fécula de maíz, cinco gotas de limón o lavanda y dos cucharadas de bicarbonato de sodio.
El proceso es el mismo, mezcla todos los ingredientes en un recipiente pequeño y con tapa para luego aplicar en las raíces. Después, masajea bastante para que el producto se difumine bien y finalmente toma un cepillo y peina toda la melena como lo haces de costumbre.

Aquí tienes tres opciones maravillosas para selecciones la más adecuada según tu color de cabello y necesidades. Todas cumplen con la función principal de disimular el exceso de grasa.